La cirugía de las mamas se conoce con el nombre de mamoplastia. Existen diferentes tipos de intervenciones en función del objetivo que se busque: aumento o reducción del tamaño o fijación. También la cirugía puede ser consecuencia de una enfermedad o una reconstrucción tras una cirugía previa.
En cualquier caso, al igual que ocurre con otras heridas postoperatorias, durante las primeras fases es importante ser prudentes con la actividad y tratar de cuidar muy bien las heridas para evitar infecciones y complicaciones. Una herida infectada o complicada origina una cicatrización más lenta y en peores condiciones y un reinicio de la actividad habitual más tardío.
Las primeras 24 horas suelen ser de hospitalización. El reposo absoluto es recomendable, manteniendo el cabecero de la cama un poco levantado para mantener una postura semiincorporada que evite colocarse de lado o boca abajo. En esa posición se produce un mejor drenaje y disminución de la inflamación.
El dolor durante las primeras horas es habitual, así como la necesidad de ayuda para cualquier movimiento que incluya los brazos y la parte superior del tórax, como por ejemplo vestirse o peinarse. Tampoco podrás conducir.
Durante la primera semana, es conveniente mantener un reposo relativo, y el dolor hará que no puedas retomar todas las actividades cotidianas hasta pasados 7-10 días en los que progresivamente te sentirás más capaz.
Durante este primer mes, tras la cirugía de mamas, mientras las cicatrices siguen en su fase inicial, es necesario evitar coger pesos o hacer fuerza con los brazos o movimientos que impliquen la zona de hombros y pectorales. No se recomienda el ejercicio físico en esta fase. Es preferible evitar actividades que puedan originar un traumatismo o movimientos bruscos en la parte superior del cuerpo, como por ejemplo conducir.
Para dormir sigue siendo adecuada la posición semiincorporada, evitando dormir de lado y boca abajo.
Tras la retirada de los apósitos iniciales, se aconseja llevar un sujetador anatómico durante las 24 horas del día. También puedes empezar a utilizar los parches de Trofolastin Reductor de Cicatrices Mamario.
Podrás empezar a realizar pequeños ejercicios controlados y masajes para favorecer la vascularización y la recuperación de los tejidos. El sol es contraproducente y también exponerse a agua muy caliente o sitios como las saunas.
A partir del mes tras la cirugía, si no ha habido incidencias ni complicaciones, probablemente el dolor haya desaparecido y notes solamente ligeras molestias con el estiramiento de la piel.
Salvo que te indiquen lo contrario, podrías empezar a practicar deporte que implique la parte superior del cuerpo como hacer pesas o flexiones. No obstante, escucha a tu cuerpo, y empieza a un ritmo que no suponga una sobrecarga ni dolor. Con el paso de los días notarás que las mamas van cogiendo su aspecto definitivo y te sentirás más fuerte y confiada para recuperar al 100% tus rutinas cotidianas y de ejercicio.
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